Una casa demasiado importante
Campaña: “salvemos las casas terreras canarias”
Por fin puedo decir dónde está y qué casa es la que pinté. Antes que nada, la acción de pintarla tiene una razón, que es lanzar un enorme grito de ayuda «urgente» para una causa de gran nobleza e importancia: SALVEMOS LAS CASAS TERRERAS CANARIAS y toda la Arquitectura Tradicional de toda Canarias. LA GENTE DEBE ESPABILAR y concienciarse de que son un tesoro a conservar y no una cosa vieja y sin valor. Quedan pocas, muchas en estado deplorable, y otras tantas a punto de ser tragadas por la consabida y lamentable especulación.
Una vez dicho esto, ya lo digo todo. La casa está en Güímar, zona de Chacaica, y no es cualquier casa. La planta actual se levantó (por una familia que se autoproclamaban Menceyes de Adeje), como ampliación de la casa original del S.XVIII. Allí vivió el Marqués de La Florida (de gran importancia histórica). Luego fue parte de un conocido «hotel inglés» a finales del s.XIX (Hotel El Buen Retiro). Pero es que también fue, nada más y nada menos, que LA CASA DEL OBISPO PÉREZ CÁCERES desde 1919 hasta 1961, su vivienda particular. Pero es que también fue la «Escuela Unitaria de Niños de Chacaica» (desde 1947 hasta 1967). Pero es que también fue la casa del que fue Alcalde de Güímar, D. Oscar Pérez Rosa. Quedó deshabitada a finales de los 60 y, desde entonces, el abandono y saqueo dejaron su huella.
¿Y QUÉ HAN HECHO LAS ADMINISTRACIONES, CABILDO Y AYUNTAMIENTO? NADA DE NADA. En 2001 no tuvieron ningún interés en declararla BIC (titulito que no sirve de nada, por cierto). En 2005, incluso borraron la casa del PGO: «no debería existir»(¿¿OBJETO DE DERRIBO??). Lo gracioso es que lo único que ha hecho el Ayuntamiento de Güímar es poner UNA PLAQUITA conmemorativa en 1989. LA DESIDIA DE AYUNTAMIENTOS Y CABILDOS ES ABSOLUTA EN TODA CANARIAS. Esta casa hasta tenía un precioso balcón, que ya no existe. Las ayudas que dan las Administraciones tienen siempre una descarada prioridad política hacia el Obispado (por rédito electoral, o sea, por votos): SI LA CASA FUERA UNA IGLESIA, YA ESTARÍA RESTAURADA.
Hay muuuchas casas como esta en completo abandono ruinoso y nadie hace nada. La excusa que dan las administraciones es que son propiedades particulares, cuando el Obispado (que es «muy particular») también lo es, pero se deja usar políticamente para recibir beneficios escandalosos y dinero público (de todos, también de los no creyentes) a millones (encima, el Obispado tiene tesoros, propiedades, casas, fincas, y demás patrimonio dorado de valor in-cal-cu-la-ble). A los demás propietarios sólo les pone obstáculos, ninguna ayuda y precios imposibles para que se cansen y vendan el solar, se tire la casa y sea pasto de la especulación (así ha sido durante décadas, y nos siguen colando que defienden «lo nuestro»).
Y también es «normal» la «típica» chapuza que transforma la casa para siempre y lo llaman falsamente «restauración». Hace meses publiqué que buscaba una casa terrera para pintar un mural. Sólo una persona respondió. Su familia me ha tratado como uno más de ella, han sido maravillosos conmigo. Resulta curioso, por lo menos, que la vida me haya reservado pintar la casa del obispo más importante de Canarias. Yo, que no creo en ningún dios, que me quité de la Iglesia (apostaté), que he denunciado a un ya ex-alcalde del Ayto. de Candelaria (que vive de su patrona), etc… En Canarias, la religión impide cualquier avance «lógico», impide que se restauren las casas terreras, igual que la mala política especuladora que nos malgobierna desde hace décadas (Trampa-que no Ley- del Suelo incluida). Aquí es terriblemente «normal» dejar morir las Casas Terreras, les ponen el «Se Vende» y luego D.E.P. (Despreciable Especulación Política). Nos siguen vendiendo el CCemento, asfalto y petróleo, y esa es su única oferta de empleo: seguir destrozando el paraíso que ya se cargaron.
La gente (¡¿¡canaria!?!) las da por perdidas, pero en Galicia salvan sus hórreos y en Cataluña sus masías. En Canarias, es tal la DESVERGÜENZA con las casas terreras, que «mejor me callo». Son más valoradas por los extranjeros que por los propios «canarios». Esta casa tiene más que suficientes valores para ser restaurada (históricos, sociales, culturales,…) o, cuanto menos, ser considerada parte del patrimonio. Pero, recuerden, HAY MUCHAS MÁS en toda Canarias. De esas que ves en los pueblos hechas una birria, hasta con la basura en su fachada (las insultan más todavía, los mismísimos ayuntamientos, con el consentimiento de la gente).
FIRMAR este enlace es muy importante.
Recuerda que un día ya no las ves más, porque se las cargan a cada 2×3 y construyen otro feo mamotretito. Hay que decirlo claro y actuar con implicación: SALVEMOS LAS CASAS TERRERAS CANARIAS, y TODA LA ARQUITECTURA TRADICIONAL, en toda Canarias. Pero YA, es urgente porque están en serio peligro de extinción, se las cargan todas (incluso en La Laguna, ciudad del cuento falso del titulín «Patraña de la UnAsco»).
Luis Eduardo Fierro