Alertan de la posible liberación de fibras de amianto tras el temporal de viento
Ben Magec – Ecologistas en Acción alerta de la posible dispersión de fibras de amianto tras el temporal de viento, dada la presencia de restos de uralita desprendidos de cubiertas y encontrados en Los Realejos. Denuncian el riesgo que supone la presencia de este material cancerígeno en toda la isla de Tenerife, a pesar de que fue prohibido en el Estado español en el año 2002 al reconocerse la grave amenaza que supone para la salud.
Tras el fuerte temporal de viento del último fin de semana han aparecido en las calles trozos de Uralita, la marca comercial del material compuesto de fibrocemento que cubrió muchas de las construcciones públicas y privadas hasta su prohibición, en el año 2002. Ben Magec – Ecologistas en Acción fue alertada de la presencia de placas de este material en las calles de Los Realejos.
El amianto con el que se fabricaba este material es un mineral fibroso cuyas pequeñas partículas pueden ser inspiradas, sin posibilidad de que el organismo pueda expulsarlas. Es, pues, un grave riesgo para la salud pública, puesto que origina varios tipos de cáncer. La federación ecologista denuncia que “deberíamos estar en alerta, porque el viento ha partido trozos de uralita, y esto ha supuesto la liberación de fibras al ambiente. Además, los trozos están en el suelo, al alcance de cualquiera, expuestos a una mayor degradación, cuando deberían ser tratados como material altamente peligroso”.
Advierten de que en este momento deberían tomarse medidas urgentes para resolver la situación de exposición a las fibras de los materiales recientemente alterados tras el temporal. Las fibras pueden persistir en el aire el tiempo suficiente para causar daños graves a la salud, y tanto los fragmentos que cayeron al suelo como los que quedan en las infraestructuras pueden seguir liberando partículas fibrosas.
Además, añaden que “la administración está haciendo dejación de funciones en cuanto a la protección de la salud pública, y está poniendo en grave peligro a la población. A día de hoy, dieciocho años después del reconocimiento oficial de los daños potenciales sobradamente demostrados del amianto, todavía existen estructuras de uralita en todos los municipios, y sobre todo en colegios y edificios públicos. Y aunque hemos alertado a algunas instituciones, no obtenemos respuesta”. Además, añaden que “a pesar de que en algunas administraciones, como el Cabildo insular, hay un acuerdo aprobado para hacer un inventario del amianto en toda la isla, ni se dan pasos para cumplir este acuerdo, ni para eliminarlo, ni se sabe de qué manera tratar los residuos cuando se quiere retirar a título privado”.
Por último la federación ecologista recuerda que está totalmente desaconsejada la manipulación de la uralita por parte de los particulares (ya que no se dispone del equipo necesario para no verse afectado por el amianto) y el hecho de que en los puntos limpios no se recoge por su alta peligrosidad. Es por ello que desde Ben Magec – Ecologistas en Acción se pide a las autoridades que cumplan sus funciones para garantizar la salud pública.