El Observatorio de Residuos, creado por Valbuena, no observa ni controla nada
El martes 20 de marzo, Valbuena (PSOE) convocó una reunión extraordinaria de la Comisión de Residuos, esa de la que pretende echarnos, para presentar los trabajos de lo que él, a su entender, considera que es un Observatorio de Residuos, que por otro lado es el tercer organismo que estábamos obligados a crear desde que se formalizara el PTEOR, plan de residuos, en el año 2009. Bueno, ya no se sabe muy bien si el tercero o el segundo porque Valbuena se ha liado la manta a la cabeza y ha decidido cargarse el más importante, la Mesa de Fertilización Orgánica que, como organismo fundamentalmente técnico, habría de ocuparse de buscar las mejores técnicas y el mejor destino para la materia orgánica que representa la fracción más problemática de los residuos domésticos y casi el 50% en peso. Fuera Mesa de Fertilización y fuera el Foro contra la Incineración de la Comisión de Seguimiento son dos de las propuestas que llevará al pleno del próximo dos de abril.
¿Que cómo justifica lo de cargarse la Mesa de Fertilización? Pues sencillo, desde que llegara al cargo en 2015 no la convocó hasta que se vio obligado en diciembre de 2017 (el acta no está publicada pero no creo que la veamos nunca), porque un agricultor (representante de la COAG) lo puso en evidencia en una comisión de seguimiento anterior, y alegando escasa asistencia ha decidido hacer un tótum revolútum juntando a los técnicos en materia orgánica con los de los envases, con los colectivos sociales, partidos, sindicatos… Vamos, la manera perfecta de enredarlo todo más todavía. ¡¡¡Pero cómo va a acudir la gente si es que ya ni se acordaban que eso existía tres años después de la última convocatoria!!!
Pero bueno, eso es otro tema (gravísimo pero otro tema), lo que nos ocupa es ese tercer organismo que Valbuena presentara en lo que se dio en llamar congreso internacional, allá por junio de 2016 en el Auditorio Adán Martín. A Noemí Padrón Fumero, profesora de Economía de la ULL, se le encargó hacerse cargo de la constitución del Observatorio. Ella, la verdad, no se sabe muy bien lo que ha hecho pero, eso ya se los digo yo, contar ha contado poco (nada) con la opinión y/o la visión de los que llevamos años haciendo números sobre la gestión de residuos. Ha montado ahí su chiringuito, con la ayuda de unos cuantos becarios, y ha pedido datos a 25 instituciones (son 31 municipios pero hay mancomunidades) y a día de hoy le han contestado 10. Además de ello los pobres becarios apenas si han podido introducir en la plataforma datos de esos 10 municipios pero a fecha de 2015 (que les recuerdo para el que ande despistado que estamos en 2018). Eso sí, según el modelo de Observatorio de Residuos que promueve Valbuena, y que abala Noemí Padrón desde nuestra cada vez más desvencijada ULL, la generación de los datos seguirá en manos de Ecoembes, de Martínez Cano y de los mismos de siempre que básicamente controlan el sector, el Cabildo ni pinchará ni cortará en el tema con lo que creer o no sobre la veracidad de esos números (fundamentalmente en lo que respecta a las fracciones reciclables que la propia Padrón puso claramente en cuestión el pasado martes), es asunto básicamente de fe.
Pero en fin, lo que presentó Padrón más que un Observatorio pareciera un galimatías (su contenido se presenta en ESTE ENLACE) y desde luego aporta muy poco en transparencia, eso es totalmente ininteligible para el 90% de la población dado que, entre otras cosas, se pasa de los gráficos de barra de toda la vida a los tipo araña, que para intentar representar este tema se convierten más bien en telas de araña complicadísimas de descifrar hasta para los técnicos. Los datos están, desde un punto de vista teórico pueden tener su interés para que l@s chic@s hagan sus trabajos de fin de carrera y sus tesis, pero ya les digo yo que el material que presenta la amiga Noemí ni aporta transparencia, porque la información que interesa al ciudadano ya lo ofrecía el Cabildo en formatos mucho más prácticos y sencillos; no aporta nada nuevo porque esos números son los que las empresas facilitan a las instituciones a las que les facturan precisamente en base a esos números, con lo que ustedes me dirán la fiabilidad que puede tener el tema. Pero, sobre todo, el llamado Observatorio en sí mismo es un ente que se ha creado de espaldas a la sociedad, sin escuchar a nadie y dando nuevamente la espalda a la realidad de los hechos, desviando el asunto hacia aspectos academicistas con los que no se ha trabajado jamás en los países más avanzados en esta materia. Nada de gráficos de araña ni de telarañas. Al contrario, las cositas sencillas y transparentes que es justo el camino contrario al que ha tomado el Cabildo en materia de residuos de la mano de Valbuena y Molowny que, cómo no, también tienen puestas sus expectativas laborales presentes y futuras en el mundo universitario, cuestión que sin duda no tiene nada que ver en el hecho de que hayan puesto este asunto en manos de personas que saben mucho sobre los temas hasta el preciso momento en que los sacas de su urna de cristal instalada en el campus de Guajara.
Un Observatorio que no observa ni controla nada, recibe números y los procesa sobre una plataforma que en absoluto fue concebida para eso. Precisamente Valbuena, en su obsesión por no dejar rastro de lo anterior, se cargó la completísima información que ofrecía la web de ‘reste.es’ y creó, pagando evidentemente por ello, su ‘tenerifemassostenible.es’ donde se debían presentar de manera sencilla las estadísticas de residuos que Padrón ha convertido ahora en un galimatías indescifrable. Y ahí sigue el servicio, sólo que desde que se presentó en rueda de prensa en junio del año pasado no han vuelto a actualizar un triste número, hasta 2016 se puede consultar con lo que, pese al retraso, aún está un año más actualizada que la plataforma universitaria de Noemí Padrón. Una gran triste pena no sólo la pérdida de tiempo sino el retraso que llevamos en la materia agravado sin duda por la pretensión de gestionar un tema clave como los residuos a base de ocurrencias a cual más engorrosa e impresentable. De hecho el follón que está montando Padrón con los números ha impedido hasta que Valbuena nos obsequie con su tradicional rueda de prensa de año nuevo dando datos increíbles sobre lo bien que va todo y lo bien que reciclamos los tinerfeños. Hombre, eso sí que es algo que nunca agradeceremos suficientemente a la doctora Padrón que, visto lo visto, tampoco nos va a ayudar mucho a superar nuestro padecimiento en materia de mala gestión de los residuos que nos sitúa como farolillo rojo de la Unión Europea.
Fuente: https://noincineraciontenerife.wordpress.com