Antonio Cubillo: “La verdad debe inspirarse de la práctica”
Este 10 de diciembre 2025 recordamos el fallecimiento de Antonio Cubillo. Han pasado ya trece largos años, pero como dijo en su sepelio el abogado Francisco Elá Abeme: “Son las personas las que mueren, no las ideas”.
Con la selección de este fragmento de uno de sus artículos, queremos dejar constancia de la importancia que tiene pensar críticamente la realidad que vivimos o, mejor dicho, sufrimos en estas desafortunadas islas. Cubillo señalaba, en septiembre de 2011 (fecha de publicación del artículo), la trascendencia que tiene el poder conocer nuestra realidad para luego plantearnos la posibilidad de transformar las condiciones en las que reproducimos nuestras vidas. Conocer para poder plantear una solución a los “problemas económicos y vitales que sufre la mayoría de nuestra gente”.
Las ideas de Antonio Cubillo persisten hoy en día, y también, desgraciadamente, las circunstancias que estimularon su compromiso político con Canarias.
El próximo sábado 13 de diciembre, a las 12:00 horas, tendrá lugar un solemne homenaje a la memoria de don Antonio Cubillo en el Cementerio de Santa Lastenia (Santa Cruz de Tenerife).
La verdad debe inspirarse de la práctica [fragmento]
Es a través de la práctica de todos los días, de todo lo que estamos viendo en el vivir diario de todos los canarios, como alcanzaremos a conocer la verdad y los métodos de lucha que tenemos que aplicar en esta colonia, conociendo las necesidades de nuestro pueblo en esta segunda década del siglo XXI, y ante los problemas económicos y vitales que sufre la mayoría de nuestra gente. Ahí está el secreto que debemos resolver los que llevamos cerca de cincuenta años luchando por la independencia y que no hay otra solución para esta tierra en la que hemos nacido.
Cuando estuve por primera vez en la República Popular China, en 1966, invitado oficialmente por el gobierno de Pekín en la Conferencia de Escritores Afroasiáticos, representando al MPAIAC y a Canarias, tuve el honor de discutir varias veces con el jefe histórico de la revolución china Zhou Enlai, que hablaba perfectamente el francés, entre otras lenguas.
Zhou Enlai era un joven chino de familia acomodada de funcionarios que había nacido en 1898 en Huaian, cuya familia le preparó de joven enviándolo a universidades en China, Japón y Europa, en Francia, Inglaterra, Alemania o Rusia, donde aprendió correctamente estas lenguas europeas y la forma de pensar de dichos países occidentales, lo que le sirvió de mucho en el proceso revolucionario chino y cuando fue ministro de Asuntos Exteriores de la R. Popular China a partir de 1949. Estando en Francia, en 1921, fue reclutado por el Partido Comunista Chino.
En 1966 nos recibió en la Asamblea Nacional y entabló conversación con cada uno de nosotros en todos los idiomas y nos explicó cómo había sido la revolución china, la agresión de los japoneses, cómo vivía el pueblo chino antes de la revolución (la miseria de todo un pueblo, el paro, el hambre de siglos y las penalidades del pueblo) y cómo supo luchar y se pudo recuperar y volverse un país trabajador con perspectivas de futuro.
Siempre tuve la curiosidad de saber si había estado en los principios de la guerra civil en España, pues en algunas fotos de la guerra en 1936 había visto unos chinos en el frente catalán. En efecto, me confirmó que era él, pero que solo estuvo unas semanas para verificar esta experiencia revolucionaria española, pero que enseguida tuvo que salir para China. Después, en un aparte, tras explicarle el problema del colonialismo español en Canarias y lo que deseábamos los independentistas, le hice una pregunta que un gran luchador como él solo podía contestarme. Le pregunté en francés: “¿Qué es el comunismo para un luchador como usted?”. Se quedó mirándome y me dijo: “Dar de comer a novecientos millones de chinos dos veces al día”. “De acuerdo y muchas gracias”, le dije; siempre tengo en el recuerdo esta sabia respuesta.
Mao Tse Tung decía en una de sus obras “que la existencia social de los hombres determina su pensamiento y la verdad debe inspirarse de la práctica. Es por la práctica que se concibe la verdad. Hay que corregir la verdad según la práctica”.
En términos generales, los independentistas canarios debemos sacar experiencias de todas las luchas de liberación, pero sobre todo debemos inspirarnos de la práctica diaria de nuestra lucha de liberación y corregir lo que haga falta para alcanzar nuestra meta, que es la recuperación de nuestros justos y legítimos derechos nacionales en tanto que pueblo colonizado. No tenemos que copiar a nadie, pero sí examinar las experiencias de los otros, y esto no quiere decir que nos comparemos con pueblos de millones de personas como los chinos, sobre todo teniendo en cuenta que no somos sino un millón de canarios en las Islas y un millón y medio más en la diáspora.
Antonio Cubillo


