Internet, prensa y política
“Los ciudadanos que aspiramos a un modelo de sociedad determinado, ya no estamos dispuestos a permanecer en silencio”
La inmediatez, diversidad y personalización de contenidos y la posibilidad de interacción de los usuarios entre ellos mismos y con los creadores de información, ha supuesto que Internet se haya convertido en el medio preferido para estar al tanto de la actualidad. Como consecuencia, los periódicos impresos nos parecen ya casi piezas de museo, papiros obsoletos cuya tinta fija, estructura definida y maquetación inamovible no dan pie a la participación creativa de los lectores.
Internet ha roto la relación vertical entre la prensa escrita, creadora y emisora de los contenidos, y sus lectores, receptores de los mismos, para convertirse en un espacio amplio y horizontal, supuestamente más democrático por su carácter eminentemente participativo. De la misma manera, nos encontramos conque este paralelismo también se está dando en política. Mientras la política tradicional, la de «imprenta», insiste en permanecer asida a su poltrona, una nueva política influenciada por las enseñanzas que la cultura digital nos ha traído ha emergido paulatinamente para quedarse. Los ciudadanos ya no nos conformamos con ser los receptores pasivos de las políticas. Ahora ejercemos nuestros derechos a participar activamente en el debate público que, afortunadamente, ya no queda restringido a los representantes políticos y a los expertos o tertulianos de turno.
También queremos incidir en los procesos de formulación de políticas, en la toma de decisiones de asuntos de calado para la comunidad y en la conformación del modelo de sociedad al que aspiramos. Porque la clave para entender el cambio de paradigma que está en ciernes es que ahora los ciudadanos que aspiramos a un modelo de sociedad determinado, ya no estamos dispuestos a permanecer en silencio tras escuchar a qué modelo de sociedad aspiran nuestros representantes políticos.
Eduardo Martín Almeida