Entre el patetismo de Ángel Víctor Torres y la demagogia del PP: España se pone el traje de Pilatos colonial
La «cosa» sin embargo ha agudizado las contradicciones y los desencuentros entre medianeros y » amos», razón por la cual unos y otros andan «mosqueados»
El delegado de la metrópoli en Canarias, ha dado instrucciones a las dotaciones de la Guardia Civil y Policía Estatal destinada al campo de concentración habilitado en el Puerto de Arguineguín, de que «identifique e impida cualquier acceso de fotógrafos» al recinto. El jefe del Mando de la Zona Marítima de Canarias y los responsables militares de Infantería, han recibido órdenes de la Ministra de Defensa, para que «no se suministre a Cruz Rija ningún material con destino el Muelle de Arguineguín», aludiendo que la situación «no les compete». El Ministro de Seguridad Social y Migraciones, José Luis Escrivá, el de la «agenda ocupada», no contesta a las llamadas de Torres, y Pedro Sánchez ha instado al vocero del «Gobiernito» de la colonia a «esperar, por interés de Estado, porque las prioridades ahora son otras».
Torres, por su parte, tiene entre sus manos una papa caliente: los touropetadores tienen prisa por hacer negocio y quieren las calles del sur limpias de «moros y negros» (patronales dixit). Esa es la verdadera razón por la que Torres levanta esta cortina de humo que huele también, un poco, a quemado. El «Presi» de la colonia, del gobierno de los floreros, pensaba al principio de su mandato que esto iba de «lo de siempre», de mantener la lata y llenar el cacharro de la «leche» que da Madrid y lo demás seguir haciendo como Poncio Pilatos. La «cosa» sin embargo ha agudizado las contradicciones y los desencuentros entre medianeros y » amos», razón por la cual unos y otros andan «mosqueados». Torres prometió a la patronal y los touroperadores que bajarían la tasa de contagios y éstos a cambio no le moverían el trono con escaramuzas vía PP, CC, NC y “gomeros”. Justo cuando Torres está a punto de cumplir, Madrid decide que lo de las mafias que operaban en el Estrecho y ahora lo hacen en Canarias no es prioridad, «que se las ventile el Gobierno canario», que esto está más lejos que Lesbos y Lampedusa para Europa. Hoy Torres se topa de frente con su condición de lacayo que grita en un barranco: corredores UE-Canarias, sí, pero humanitarios en sentido contrario para repartir «el problema migratorio», no. ¡¡¡Bienvenido al mundo real Sr Torres!!! ¡¡¡Bienvenido al despotismo colonial y godo!!! Porque ese es su proceder secular en toda nuestra historia: Canarias es una finca a explotar y otros escenarios pueden esperar.
Lo del PP es de traca. Quienes pusieron concertinas en las vallas de Ceuta y Melilla, quienes dieron órdenes de disparar a las dotaciones en el Estrecho, quienes se saltaron sus propias leyes y la normativa internacional, califican de «indigno» lo de Arguineguín, con una desvergüenza sin igual. El PP, de estar gobernando aquí y allá, estaría haciendo lo mismo o peor. Tal vez incluso, por aquello de contentar a quienes «apoyan» sus campañas en Canarias, estarían «fletando» aviones de Binter a donde cuadrara, porque «la prioridad es otra». Para España siempre, en Canarias, la prioridad es explotar.
Hijos de Canarias