Unid@s se puede apoya la propuesta de crear un impuesto para bebidas azucaradas y bollería industrial
María Jose Roca, concejala de Unid@s se puede, a propuesta de la Comisión de Salud de la Asamblea Ciudadana Lagunera, se hace eco del comunicado de la Asociación para la Defensa de la Sanidad Pública de Canarias (ADSPC) proponiendo la creación de un impuesto que grave las bebidas azucaradas y la bollería industrial como medida para reducir las altas tasas de sobrepeso y obesidad.
Indica que 25 gramos de azúcar es el total permitido que un niño debería ingerir en todo el día, sin embargo según la Asociación Americana de Cardiología, una lata de refresco tiene 30 gramos de azúcar, 5 gramos más del total. Por su parte la Organización Mundial de la Salud (OMS) en su informe “Las políticas fiscales para la dieta y la prevención de Enfermedades No Transmisibles” (ENT) recomienda que los impuestos sobre las bebidas azucaradas se aumenten al menos un 20%, con el objetivo de reducir su consumo y, por tanto, disminuir el riesgo de obesidad, diabetes tipo 2 y caries dental.
«Las fuerzas políticas y la sociedad civil deben estar vigilantes con la falta de acciones responsables por parte de los dispositivos sanitarios, y particularmente los centros de Atención Primaria, cuando en sus propias instalaciones hacen publicidad destacada de marcas comerciales que fabrican y ponen a la venta productos hipercalóricos, con la consiguiente afectación en la salud de menores y personas adultas» asevera Roca «como muestra tenemos un botón: el Centro de Salud Laguna Mercedes, donde en lugar destacado aparece una máquina dispensadora de refrescos, igual que en otros espacios de titularidad municipal como instalaciones deportivas o vecinales».
Unid@s se puede no descarta llevar a cabo iniciativas en el municipio y en el pleno para concienciar a la población sobre las consecuencias del consumo de bebidas azucaradas sobre la Salud y que se lleven a cabo políticas fiscales, ya que según la propia OMS, “el aumento de al menos el 20% del precio de venta al público de las bebidas azucaradas podrían redundar en una reducción proporcional del consumo de estos productos”, finaliza Roca.